Nuestro estimado hermano/hermana,
Tenemos ante nosotros una gran verdad que no debemos olvidar, sino que, por el contrario, hacemos todo lo posible por olvidar:
El mejor remedio para esta negligencia es:
Es un hadiz…
En este hadiz se nos recomienda recordar y reflexionar con frecuencia sobre la muerte. Ignorar este consejo no es sensato, pues cerrar los ojos no oculta ninguna verdad.
La sabiduría no consiste en olvidar la muerte, sino en buscar maneras de trascenderla, de dejarla atrás, siendo conscientes de que el viaje por el mundo es hacia la tumba y que termina con la muerte.
Un paciente que olvida su enfermedad puede experimentar un breve alivio. Pero esta negligencia lleva a que la enfermedad avance aún más. El sufrimiento de este breve placer dura mucho tiempo.
Puede ofrecer al estudiante una oportunidad de diversión pasajera. Pero la consecuencia de esta imprudencia son las dificultades, las penalidades y los sufrimientos. Un comerciante que gasta su capital sin medida, disfruta de un placer engañoso durante un tiempo. Pero el final de este placer termina en la bancarrota.
La situación de quienes intentan olvidar la muerte se puede comparar a esto: mientras uno está sentado en su habitación o descansando en un parque, observa un insecto solitario. Con la intención de pasar un rato, se inclina y acerca la mano. El insecto retrocede inmediatamente y comienza a huir a una velocidad considerable —desde su perspectiva—. Uno observa con placer su huida. Se va y se esconde, por ejemplo, detrás de una caja de cerillas tirada en el suelo.
Extiendes un poco el cuello y te quedas observándolo. Casi sientes cómo respira con emoción.
De repente, otro insecto se acerca a él. Casi se puede oír al insecto que huye decir al otro: …
Nuestra situación ante el ángel de la muerte no es muy diferente. Adónde vayamos, detrás de qué nos escondamos, en qué placeres nos sumerjamos, con qué nos entretengamos para olvidarlo, el resultado es siempre el mismo. Él nos acecha constantemente, esperando la orden de su Señor para tomar nuestras almas.
La sabiduría consiste en amar la muerte y en esforzarse por entregar nuestra alma al ángel de la muerte limpia e inmaculada. No pensar en el futuro, olvidar la muerte, no debería ser una filosofía de vida digna del ser humano…
Saludos y oraciones…
El Islam a través de preguntas.
